La Archidiócesis celebra la III Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores
El pasado domingo 23 de julio a las 12:00 horas, la catedral de Santa María la Real de la Almudena acogió una celebración eucarística con ocasión de la III Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores, cuyo lema este año tiene se inspira en las palabras de la Virgen en el Magníficat: “Su misericordia se extiende de generación en generación” (Lc 1, 50). Organizada por la delegación de Laicos, Familia y Vida, la Misa estuvo presidida por monseñor Jesús Vidal, obispo auxiliar de Madrid, y se aplicó en acción de gracias por la vida y la entrega prestada a la familia y a la sociedad de nuestros abuelos y mayores.
Esta celebración precede a la próxima Jornada Mundial de la Juventud que tendrá lugar en Lisboa la próxima semana, como ha hecho notar el Santo Padre en su mensaje para esta Jornada de los Abuelos y Mayores:
A ustedes, jóvenes, que se están preparando para ir a Lisboa o que vivirán la Jornada Mundial de la Juventud en sus lugares de origen, quisiera decirles: antes de ponerse en camino vayan a encontrar a sus abuelos, hagan una visita a un anciano que esté solo. Su oración los protegerá y llevarán en el corazón la bendición de ese encuentro. A ustedes ancianos les pido que acompañen con la oración a los jóvenes que van a celebrar la JMJ. Estos muchachos son la respuesta de Dios a sus peticiones, el fruto de lo que sembraron, el signo de que Dios no abandona a su pueblo, sino que siempre lo rejuvenece con la fantasía del Espíritu Santo.
La Penitenciaría Apostólica ha concedido este año la indulgencia plenaria para todos los fieles ancianos que participen en las liturgias celebradas con motivo de la Jornada, y a todos aquellos que en los días inmediatamente anteriores o posteriores a la Jornada visiten a un anciano.