La profesora Cristina Guzmán, nombrada por la Conferencia Episcopal como miembro de la Comisión Asesora del PRIVA
Cristina Guzmán, profesora de la materia Situaciones Familiares Especiales en nuestro Pontificio Instituto Juan Pablo II de Madrid, ha sido nombrada recientemente como parte de la Comisión Asesora del Plan de Reparación Integral a los menores y personas equiparadas en derechos Víctimas de Abusos Sexuales (PRIVA), en representación de la Conferencia Episcopal Española (CEE).
El pasado 25 de septiembre tuvo lugar la primera reunión de la Comisión, con la presencia del Presidente de la CEE, Mons. Luis Argüello, y del Secretario General. Mons. César García Magán, así como del Presidente de la Conferencia Española de Religiosos (CONFER), el P. Jesús Díaz Sariego. De este modo se daba cumplimiento al mandato de los obispos, reunidos en Asamblea Plenaria extraordinaria el pasado 9 de julio, de buscar las vías de ofrecer una respuesta integral a aquellas personas que han sufrido abusos en contextos eclesiásticos, especialmente cuando las vías judiciales no pueden ofrecer una solución. Así, el objetivo es brindar una reparación integral a las víctimas, abarcando el apoyo psicológico, espiritual, social y económico. La Comisión Asesora evalúa cada caso desde una perspectiva ética y de justicia restaurativa, buscando una reparación adecuada sin requerir a las víctimas pasar nuevamente por un proceso judicial con cinco principios fundamentales: la centralidad de la víctima, la búsqueda de la verdad, la acción coordinada, la asunción de cauces de reparación y la elusión de la revictimización.
Imagen extraída de la página web de la CEE. Cristina Guzmán, tercera comenzando por la derecha.
Precisamente a propuesta de la Conferencia Episcopal Española, la Dra. Cristina Guzmán, junto con otras cuatro mujeres, forma parte del total de 11 especialistas que componen la Comisión.
La destacada jurista, con casi 45 años de experiencia en Derecho Civil y Canónico y desde su compromiso con la justicia, se convierte así en una figura clave para el desarrollo de este plan. Cristina Guzmán aporta una sólida formación y sensibilidad hacia las víctimas; su carrera en derecho de familia, nulidades matrimoniales y procesos de adopción le ha dado una profunda comprensión de los conflictos emocionales y jurídicos que enfrentan las personas afectadas.
Para ella, la existencia de esta Comisión es un compromiso tanto con la Iglesia como con la sociedad, misión que afronta “con ilusión y entusiasmo, sentimiento este que prevalece sobre el peso de la responsabilidad”, como ha afirmado en declaraciones a la Revista Ecclesia, añadiendo que “todos los que formamos parte de la comisión estamos muy comprometidos e ilusionados con el trabajo que tenemos por delante, porque todos estamos esperanzados en que se pueda dar una reparación moral a todas las víctimas”.